Miercoles 8 de Mayo 2.013
Las noticias sobre la Plaza de Toros de La Santamaría, se ensombrecen cada día más. Hemos tenido oportunidad de dialogar con dirigentes y aficionados sobre los más recientes acontecimientos y, la realidad, cada vez se ennegrece más el ambiente en contra de la realización de las corridas de toros en la Plaza de Santamaría de esta capital.
Recibí un mensaje de Harold Ronderos en el que me confirmaba que “... la Alcaldía de Bogotá anuncia el cierre de la plaza por cuatro años para reparaciones locativas de urgencia. Solo quedará vigente el contrato de la pista de patinaje”. Grave y premonitorio para el futuro del coso en los próximos años.
En el diario El Tiempo, edición de Bogotá, en su página 11, presenta una nota titulada: Prohíben conciertos en la Plaza de Toros y, en su texto, "Javier Pava, director del Fondo de Prevención y Atención a Emergencias (Fopae), advirtió que la estructura y los muros de la plaza cultural de la Santamaría están tan débiles, que podrían desplomarse durante conciertos a los que asistan gran cantidad de espectadores. Hay unas grietas en zonas aledañas al edificio que generan vulnerabilidades en la estructura cuando hay mucha gente ya que generan sobresaltos en las graderías” explicó Pava.
Concluye el artículo del diario matinal: “La polémica decisión había generado reacciones entre el sector cuyo sustento económico es la fiesta brava, y entre los fieles asistentes a las tradicionales temporadas taurinas”.
Hablando con Ronderos quien ha sido ejecutivo de la Corporación Plaza de Toros por varios años y conoce a fondo todos estos aspectos, nos entregó una explicación que viene a plantear una argucia más de parte del Alcalde y en contra del espectáculo taurino.
“En un estudio realizado hace algunos años en ocasión del montaje de la ópera Carmen, se hizo el análisis de sismo resistencia que arrojó una conclusión en el sentido de hacerse necesario un reforzamiento de unos soportes siempre y cuando se hicieran espectáculos musicales que implican mayor movimiento de los aficionados. Pero, en ningún caso para la realización de las corridas de toros”.
Esto pone en evidencia que el discutido burgomaestre logró encontrar ese estudio y de él se ha prendido para darle una mayor fuerza a la suspensión de las corridas de toros. “Ojalá no llegue a extremos de derruir uno de los tendidos, porque ahí sí, el perjuicio y las consecuencias a largo plazo, serían peores” afirmó el funcionario bogotano de la Corporación Taurina